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El proyecto:

Música Colectivo-Informal

En 2009 el escritor Mark Fisher advirtió en su libro Realismo capitalista sobre la clausura, a partir de los ‘80, de cualquier alternativa al capitalismo. Esta clausura ha impuesto hoy en la cultura la imposibilidad de concebir lo “alternativo” o “independiente” fuera del mainstream.

En el realismo capitalista la única opción es la de reproducir formas de un pasado ya mercantilizado. Lo clausurado, por tanto, junto al presente, es también el futuro.

Ante este panorama, cualquier proyecto artístico que pretenda introducir novedades en la realidad establecida –tal cual es innovar– debería ensayar caminos distintos.

En el caso de la música artística, una de las propuestas conceptuales más radicales provino del texto Vers une musique informelle, escrito por el filósofo Theodor W. Adorno.

Para Adorno una musique informelle descartaría todas las formas que se enfrentan a ella de una manera externa, abstracta o fija, constituyéndose objetivamente en el fenómeno (material sonoro) y no en estas legalidades exteriores.

Siendo la musique informelle un ideal aún no consumado, si persiste, al menos, la intención de acercarse a ella, debería hacerse examen de variables que no atiendan de manera exclusiva a la naturaleza formal de la música.

Uno de los aspectos que habría de revisarse en la música refiere a ese alguien que la crea, quien ha sido históricamente un sujeto: el compositor. En este sentido, un dilema interesante versaría sobre cómo crear música más allá del sujeto compositor.

El proyecto MÚSICA COLECTIVO-INFORMAL se concreta en dos vías: la creación de una obra musical mediante la improvisación colectiva y la implementación de un sitio web que permita documentar dicho proceso, utilizando textos, gráficos, audios, videos y fotografías.

La obra musical buscará proponer una solución artística al dilema relativo al desplazamiento del sujeto compositor, intentando así una correspondencia con los ideales aún por realizar de la musique informelle.

Por tal razón, si aquí la creación musical tiene a la improvisación colectiva como medio, no sería, entonces, para satisfacer la subjetividad de un individuo que subordina la materia sonora a un trabajo de representación.

Ciertamente, una de muchas formas de producir sonidos que logren anticiparse a cualquier sujeto que pueda obstruirlos, es hacerlo de forma colectiva –antes que individual– e improvisada –antes que domesticada–.

La creación es desarrollada por cuatro músicos improvisadores y un director de orquesta, quien, por su parte, asumirá la responsabilidad de guiar la realización de la obra en una segunda etapa, en la cual se sumará una orquesta de estudiantes al cuarteto improvisador.

Pensando en el futuro desarrollo de la obra junto a estudiantes, el sitio web que la documenta funcionará como una partitura multimedial de la obra, permitiéndoles un acceso libre, múltiple y abarcador a la práctica improvisatoria.

Material gráfico

Fotografías

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En 2009 el escritor Mark Fisher advirtió en su libro Realismo capitalista sobre la clausura, a partir de los ‘80, de cualquier alternativa al capitalismo. Esta clausura ha impuesto hoy en la cultura la imposibilidad de concebir lo “alternativo” o “independiente” fuera del mainstream.

En el realismo capitalista la única opción es la de reproducir formas de un pasado ya mercantilizado. Lo clausurado, por tanto, junto al presente, es también el futuro.

Ante este panorama, cualquier proyecto artístico que pretenda introducir novedades en la realidad establecida –tal cual es innovar– debería ensayar caminos distintos.

Uno de los aspectos que habría de revisarse en la música refiere a ese alguien que la crea, quien ha sido históricamente un sujeto: el compositor. En este sentido, un dilema interesante versaría sobre cómo crear música más allá del sujeto compositor.

El proyecto MÚSICA COLECTIVO-INFORMAL se concreta en dos vías: la creación de una obra musical mediante la improvisación colectiva y la implementación de un sitio web que permita documentar dicho proceso, utilizando textos, gráficos, audios, videos y fotografías.

 

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